jueves, septiembre 09, 2010

¿Una caricatura DEL país o una caricatura DE país?


Septiembre sufrió la invasión del tema Bicentenario y no hubo niños héroes que lo defendieran. A favor o en contra, aparecen en los medios mensajes panfletarios acerca del orgullo de ser mexicanos y reflexiones relacionadas con el México que vivimos y los escasos motivos para festejar. Ya se pueden ver en la cartelera cinematográfica avances de cintas como Hidalgo, por una parte, mientras El Infierno se gana la taquilla y a la crítica más exigente. Nadie puede ya ignorar la violencia que vivimos en un antro, en un restaurante, en una esquina, en un hogar. Nadie nos puede mentir acerca de esta realidad. Pero, ¿cómo nos verán en 100 años? ¿Y en 200?

Luego de ver la caricatura que publicó Daryl Cagle para ilustrar, de manera inmejorable, esta época de la que nos tocó ser testigos y actores, recordé la portada de La historia de un país en caricatura (El Fisgón/2000) -que bien podría llamarse "La historia de una caricatura de país"-, donde una águila famélica se postra sobre un cangrejo y la serpiente (que simboliza al mal) se le enreda entre las patas con la leyenda: "Progresos de la República Mexicana". Me dispuse a hojear el libro, para encontrar esta imagen y descubrí en ella un símil a la controvertida imagen del periodista norteamericano, pero dibujado por un autor mexicano, anónimo, en 1829. Además, localicé fuertes críticas de la época al gobierno de Juárez, donde incluso aparece una consigna en su contra que dice: "Sufragio efectivo, no reelección" y, para quienes adoramos el arte, una crítica a la clase política del país (juarista) a la que se califica como ignorante, pues se la pasaban dormidos en la ópera mientras escuchaban a la hoy legendaria cantante Ángela Peralta.
Muchos años después, Juárez es la imagen del gobernador perfecto. Pero, en aquel entonces, ¿quién sabe?
Se dice que la historia es impuesta por quienes gobiernan. Es posible que así como 1810 correspondió a la Independencia y 1910 a la Revolución, 2010 sea, en muchos años, recordada por las historias de narcotráfico e ingobernabilidad que vivimos. Quizás, ellos nos gobiernen y sean "los buenos" de la historia y entonces celebremos esta fecha. O tal vez, sea marcada como el inicio de lo que Calderón ve como una guerra, tan ficticia en sus ideales como lo fueron en sus inicios las de Reforma, la Revolución y la de Independencia. Recordemos que las otras versiones, las no oficiales, las más serias, cuestionan a El Grito como independentista por el "¡Viva Fernando VII!", y ven a Francisco I. Madero como un enviado del gobierno norteamericano para desestabilizar a un país que tenía fuertes vínculos con sus enemigos.

No lo negaría jamás: amo este país, me gusta conocerlo, recorrerlo, su gente, su cultura y hasta he llorado con el Himno Nacional, pero veo que así como no es conveniente idealizar a la persona que amamos y su pasado, no lo es hacerlo con nuestro país y nuestro pasado. Sólo eso nos permitirá crecer para no volver a ver, en 100 años, a nuestra águila muerta de hambre, ensangrentada o baleada.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

bravo!

dominga

Anónimo dijo...

Dice : Bravo, Braavo, Bravo, Bravísimo

Anónimo dijo...

pero en algo hay k kreer... esta bien estar enterado de komo fueron las cosas pero hay k tener algo k festejar...:)

Anónimo dijo...

Francisco.. me encanta tu forma de pensar, escribir, de xpresarte, te felicito por tus ideales..pero..... cuidado mucho cuidado, no a todos les gusta ver, escuchar, y decir la verdad de nustro Mexico. take care, love