miércoles, febrero 06, 2008

El libro de la tarea


Saúl fue a la escuela. Un día antes, la maestra le encargó de tarea que llevara su libro favorito. Y su decisión se convirtió en una noticia muy especial para mí. Se decidió por "Cuentan de algunas letras" y me puso muy feliz eso. Lo imaginé con su libro adentro de una pequeña mochila de Spiderman con olor a sandwich de mermelada y plátano.
Hace unos meses, le regalé ese libro a Miriam para que se lo diera a él y se lo apropiara. Conociéndola, se sentó a leerle esas letras que ilustró Rocío Coffeen con toda la magia que sabe traer en el pincel. "Eres mi amigo favorito", le dice Miriam de vez en cuando, y de ese tipo de cercanía se hacen los buenos lectores. He leído, y creo por completo, que la afición a la lectura llega por los afectos. Así que, en la medida que una mamá como ella lea a su hijo y lo haga como un premio de su tiempo, los niños encontrarán en los libros un refugio.
Dice Miriam que prefiere éste y no el de "Se busca príncipe azul, pero diferente", porque es para niñas. También dice que ya le pidió que comprara las otras letras. Tendré qué hacer algo al respecto (por ejemplo, escribirlo).
Por lo pronto, insisto en lo que admiro, quiero y adoro a Miriam por el tipo de mujer y madre que es. Ojalá llegue a conocer a Saúl, otra de las personas que sin saberlo me animan a seguir en esto de las letras para niños.

*Saúl en la escolta de su escuela. Gracias por la foto Miriam.

Dicen que es... pero yo no me acuerdo


Hace unas semanas fuimos a Tuitán, una ranchería que se encuentra a poco más de dos horas de la cabecera municipal. Fuimos a inaugurar una plazoleta. Entonces, Alicia, Noé, Macario y otros más, aseguraron haber encontrado a mi hijo perdido. "Se parece mucho a ti", me decían. A mí no me parece así. Además, yo no recuerdo haber ido a este lugar (que por cierto está bonito), ni haberme involucrado con alguien de ahí. No me acuerdo, lo juro. No pasó nada. Pero dicen que la muestra está viva allá. ¿Tendré tanto alcance? Obvio, es el niño de la foto. ¿Verdad que no nos parecemos?

sábado, febrero 02, 2008

Vida complicada

Es sábado. Tuve una junta a las 9:00 y lo había olvidado hasta que me llamó por teléfono Maribel, a las 9:30, para recordarme. Una noche antes me fui con Vladimir a El Arenal, a sus fiestas. Por aquella plaza no se puede caminar, se escuchan bandas toda la noche, mariachis en algunos lugares (a estos los prefieren los adultos), y cada grupo de jóvenes se pone a beber de pie, en cualquier lugar, con una bolsa de hielo, dos botellas de tequila, coca y agua mineral al centro. Uno de ellos es quien paga a los músicos y las parejas, de ese grupo de amigos, bailan. Creo que los únicos discos que he comprado de banda, es uno de Antonio Aguilar y otro de Joan Sebastian. En la radio, una banda no tiene nada qué ver con lo que sucede en la plaza de un pueblo. Acá, eso se vive. Justo hace un año, fui a ese mismo lugar, acompañado por Maribel (quien se ha convertido en una de mis mejores amigas) y desde entonces, me queda claro que no hay nada así en Guadalajara. Las muchachas visten lo mejor que tienen para no repetir modelo en los 9 días de fiesta. Sí, 9 días. Ellos, visten fashion también, con camisas vaqueras de manga corta, pantalones Wrangler, botas limpísimas y sombreros de las más equis posibles. Quienes aún estudian, van a la escuela al siguiente día con mucho sueño, con la resaca de la noche anterior, con dos horas dormidas. No dicen nada los profesores. Esto es parte de la cultura que se vive por acá. Las terrazas están a tope. En ellas, la gente también bebe, todos beben. Todos están en la fiesta. Lo mismo sucede en Amatitán, Magdalena y Tequila. Me dicen que lo mismo pasa en Etzatlán (a donde me han recomendado mucho ir), Hostotipaquillo, Ahualulco y Tala. Sí, mucha fiesta. Con ésta, inicia el año. Pegadita está la de Amatitán y al mismo tiempo la de El Salvador (en la sierra). Allá, por cierto, "debo" ir, porque mi jefe es nativo y nos ordenó que debíamos estar en la peregrinación que le toca al Ayuntamiento. "La más gente posible", dijo. "Ai'quir. No falte usté. Ahi dice", dijo El Piporro en "Ahi viene Martín Corona". Ni modo. Dicen que estará la Banda Astilleros, y dicen también que bajarán de todas las rancherías. ¿Qué hago con mi vida? Me parece que sólo me queda disfrutarlo. "Ni hablar mujer, trais puñal". Luego sigue un descansito, luego las fiestas del otro lado del Volcán: Etzatlán, Tala... A esas no he ido. Luego Magdalena y cerramos el año en Tequila. Nadie vino. Se la perdieron el año pasado. Sólo Los Bomberos, Luis Delgadillo y Maya, Vania (hija adoptiva casi, casi porque se ligó a un tipo altote del rancho de Santa Teresa) y ya.

Como decía, es sábado, son las 12:00, y me hago el ánimo de empezar a trabajar, para terminar pronto, ir a la comida del bautizo de un sobrino de Maribel, ir a una boda civil y tal vez, ir a Amatitán. La vida es taaaaaan complicada.

Les debo la foto.